Tengo que confesar que la reunión de ayer, personalmente me pareció la más interesante que hemos tenido hasta ahora, ya que abordamos diferentes temas, a cada cual mas importante.
- Comentamos en tono de humor la percepción que la mayoría de la gente (afortunadamente, cada vez menos) tiene respecto a temas como el colecho (dormir con tus hij@s en la misma cama), la lactancia prolongada, y el porteo.
Las frases típicas, "va a cambiar tu teta, por la de la novia", "lo vais a trastornar", "¿ahí va cómodo y/o a gusto?", "nunca va a salir de vuestras faldas"....son algunas de las que más se oyen. :)
- Hablamos del papel del padre. Cómo se comportan los padres en el cuidado de los hij@s, sobre todo por la noche, ya que éste momento suele ser el más duro para nosotras. Dificil para todas, sin duda, pero especialmente para las mamás con dos niñ@s/ bebés.
Muchas coincidimos en que nos ponemos muy nerviosas, tensas o incluso respondemos con el llanto, cuando prestamos atención a un bebé que se nos ha despertado y casualmente se despierta el otro. Nos cuesta controlar la situación, y requerimos la ayuda del padre, que algunas veces se presta y otras veces no. Unas madres tienen que hacer verdaderos malabares para atender las necesidades de sus pequeños, mientras otras lo viven con mas calma cuando se sienten acompañadas.
Pero, en lo que todas estuvimos de acuerdo en que, la noche es un momento para ponerse "a temblar". Lo vivimos con respeto, ya sea con un niño, dos o tres. :)
- Tocamos el tema de los profesionales de la sanidad pública en el área de ginecología.
Palencia al ser una ciudad pequeña conocemos a casi todos los ginecólog@s, si no por experiencia propia, por oidas. Algunos gozan de muy mala reputación, otros de muy buena. Aunque llegamos a la conclusión de que todo depende de la situación en la que te hayas encontrado puedes tener una opinión u otra de ellos. Por ejemplo, nombramos a algún ginecólogo que goza de no muy buena reputación y alguna de nosotras comentó haber tenido buena experiencia, y viceversa.
Dentro de este tema comentamos que, al igual que uno de nuestros derechos como pacientes es poder poner reclamaciones si no nos sentimos a gusto con el trato recibido, sería muy buena opción, hacer lo mismo a la inversa. Es decir, cuando recibimos un trato amable, cariñoso y con el que nos hemos sentido bien, deberíamos mandar una carta al propio hospital informandolo.
Así, además de saber qué es lo que deberían cambiar, también sabrían cual NO cambiar.
En fin, como podeis comprobar aprovechamos muy bien nuestro espacio...quedais invitadas al próximo encuentro.
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